¿Percibes lo que te rodea con dificultad para ver los colores, falta de nitidez o visión borrosa? Estos pueden ser algunos de los síntomas de las cataratas. No obstante, existen más señales que pueden ayudar a identificarlas. En este artículo te explicamos qué son las cataratas, cómo se manifiestan, a quién afectan con más frecuencia y cuál es el tratamiento más eficaz.

Las cataratas no aparecen de un día para otro: suelen desarrollarse de forma gradual, provocando que el paciente pierda nitidez progresivamente, como si hubiera una neblina delante de los ojos.

¿Qué son las cataratas?

Las cataratas son la opacificación del cristalino (la lente natural del ojo). Cuando el cristalino pierde transparencia, la luz no atraviesa correctamente el ojo y la visión se vuelve borrosa, con menos contraste y, en ocasiones, con colores más apagados.

Causas: el ciclo de la vida y el envejecimiento

Conforme envejecemos, se producen cambios físicos en todo el cuerpo y la vista no es una excepción. Por ello, un porcentaje importante de la población desarrolla cataratas con el tiempo, que pueden llegar a limitar la visión de forma notable.

Síntomas de cataratas: señales de alarma

Existen varios indicadores que pueden ayudarte a sospechar que podrías estar desarrollando cataratas. Los más habituales son:

• Visión borrosa o sensación de “neblina”.
• Pérdida de nitidez y de contraste, especialmente con poca luz.
• Colores menos vivos o amarillentos.
• Mayor sensibilidad a la luz (deslumbramientos) y peor conducción nocturna.
• Cambios frecuentes de graduación o dificultad para ver de cerca/lejos como antes.

Estos síntomas pueden afectar a la calidad de vida. Por eso, es importante realizar una revisión y valorar la intervención en el momento adecuado, antes de que la catarata avance demasiado.

¿Cómo actuar frente a las cataratas?

Actualmente, el único tratamiento eficaz para las cataratas es la cirugía. En Oftalmoplus estamos especializados en este tipo de intervención y contamos con tecnología avanzada y un equipo con experiencia contrastada.

Antes se recomendaba esperar a que la catarata estuviera muy avanzada. Hoy, en muchos casos, se aconseja vigilar desde su aparición y operar cuando los síntomas ya afectan al día a día, para evitar que el cristalino se endurezca en exceso y la cirugía se vuelva más compleja.

¿En qué consiste la operación de cataratas?

La cirugía de cataratas consiste en sustituir el cristalino opaco por una lente intraocular. La técnica más utilizada es la facoemulsificación, que emplea ultrasonidos para fragmentar la catarata y poder aspirarla a través de una incisión pequeña.

¿Cómo es la intervención?

• Anestesia local en gotas (habitualmente no requiere sedación).
• La intervención suele durar pocos minutos.
• El paciente puede abandonar la clínica poco tiempo después por su propio pie.

Además, en la misma intervención, y según el tipo de lente intraocular indicada, se puede valorar la corrección de defectos como astigmatismo, hipermetropía o miopía, e incluso mejorar la presbicia en determinados casos.

En cuanto a operar ambos ojos, puede planificarse en fechas cercanas, pero lo más habitual es realizarlo con un intervalo de varios días según criterio médico, para minimizar riesgos y asegurar una recuperación adecuada.

Preguntas frecuentes sobre cataratas

¿Las cataratas se curan con gotas?

No. Actualmente no existe un colirio que elimine la catarata. El tratamiento definitivo es la cirugía.

¿Cuándo conviene operarse de cataratas?

Cuando la catarata afecta a tu calidad de vida (conducir, leer, trabajar, ver con seguridad) y el especialista confirma que la intervención es la mejor opción.

¿La cirugía de cataratas duele?

Habitualmente no. Se realiza con anestesia en gotas y suele ser un procedimiento breve.

¿Cuánto tarda la recuperación?

La recuperación suele ser progresiva y el especialista pautará colirios y revisiones. Los tiempos pueden variar según cada paciente.

¡Mira a la vida con más comodidad!

Recuerda: ver borroso, notar manchas, sensibilidad a la luz o perder nitidez no es “lo normal” si está afectando tu día a día. Una revisión puede ayudarte a detectar el problema y encontrar la mejor solución.