Pocas personas paran la atención necesaria que nuestros ojos requieren y por ello hoy hemos pensado que te gustaría saber cómo ejercitar tu vista. Los beneficios que pueden darte van desde la prevención hasta la pura relajación (¡que nunca está de más!) o, incluso, la mejora de tu vista

 Aunque las patologías visuales se deban en su mayoría a alteraciones en el globo ocular,  no siempre tenemos que focalizarnos en la genética, ya que malos hábitos también pueden ser los causantes. Por ello, hoy te traemos diversos ejercicios para entrenar tus ojos como es debido. Si te interesa el tema y te gustaría ver un tutorial, aquí te dejamos un enlace que te permitirá, no solo realizar las indicaciones según te las imaginas sino repetir aquello que aparece en el vídeo.

 Ejercicios de movilidad

 Empecemos jugando con las trayectorias que dibujemos con nuestra mirada. Puedes empezar dibujando con los ojos un ocho tan grande como te sea posible, sin mover la cabeza, por supuesto; únicamente mediante tu trayectoria visual. También puedes probar realizando cambios aleatorios en la dirección de tu mirada: dirige tu foco de atención hacia arriba y abajo, izquierda, derecha,… pon a prueba la agilidad de tu visión.

Tensión ocular controlada

 Cierra los ojos muy fuerte durante cinco segundos. Después ábrelos durante otros cinco segundos y repite este ejercicio varias veces.

Juguemos con las distancias y el enfoque 

Lee un libro a la distancia en que leas bien sus letras y trata de entrenar esa distancia. También puedes probar con letras más grandes colgando un cartel en una pared lejana.

Corrijamos las asimetrías o, al menos, detectemos su existencia para tratarlas en el oftalmólogo

 Escribe una letra en un dedo de tu mano y colócala a una distancia más o menos lejana de tu cara. Empieza a jugar entonces tapando tu ojo izquierdo y derecho y detecta si tu vista tarda mucho en tener una imagen unificada de la letra según con qué ojo estés mirando. Los expertos dicen que si tardas más de un segundo tu visión no está funcionando del todo bien. 

 Relájate

Pon las palmas de tu mano sobre tus ojos y comienza a moverlos en varias direcciones, realizando una especie de masaje. También puedes aplicarte una infusión templada en la zona con la ayuda de un trapo o algodones. Así relajaras tus músculos oculares. También hay quien apuesta por los baños de sol: con los ojos cerrados mira al sol y ve y mueve tu cabeza suavemente. Al acabar, refréscate con agua fría para calmar la zona.

 ¿Te suena?

Te vamos a narrar un ejercicio visual del que probablemente ya hayas sido partícipe. Coloca un dedo frente a tus ojos y dibuja líneas en el aire para seguir su movimiento con tu mirada. Puedes ampliar progresivamente la distancia, la velocidad y las direcciones. En este caso puede ayudarte un amigo para que sea más cómodo.

 Parpadeos voluntarios

Este ejercicio humectará tus ojos, ya que está demostrado que por varios factores como las pantallas dan lugar a que parpadeemos menos. De hecho, este ejercicio da lugar a que te demos un consejo: ¡limita el uso de pantallas siempre que puedas!

 ¿Qué beneficios nos aportan estos ejercicios visuales?

 Si nos acostumbramos a realizar estos ejercicios de vez en cuando, nos beneficiaremos de numerosas ventajas: descanso y relajación, prevención de la fatiga visual, huir de los efectos nocivos del fenómeno del “ojo seco”, una mejora de la movilidad ocular o, incluso, el controlar del estrés y la ansiedad. Por último pero no menos importante: la posible detección de alguna anomalía para que los expertos oftalmólogos puedan tratarla como es debido.

 Desde Oftalmoplus encontrarás medicina preventiva, revisiones periódicas, pruebas oftalmológicas para el diagnóstico y tratamiento e intervenciones quirúrgicas y seguimiento. Además, en el caso de querer olvidarte de las gafas en tu vida, contamos con profesionales especializados en este tipo de cirugía! Cuenta con nosotros.