Las moscas volantes o miodesopsias se manifiestan en forma de puntos, destellos o hilos que se mueven por tu campo visual pero que en realidad no están físicamente delante de ti. Todo lo contrario, son una especie de fibras de colágeno formadas en nuestro globo ocular que proyectan estas sombras sobre la retina. Veamos las principales causas que generan este fenómeno de la mano de nuestros expertos

No, ni estás sufriendo alucinaciones ni eres el primero que se pregunta qué le está sucediendo. De hecho, es una de las consultas más típicas, más allá de las visitas regulares recomendadas por los oftalmólogos. ¡Así que, que no cunda el pánico! 

Estas formas irregulares suelen ser consecuencia de la deshidratación natural que sufre el vítreo o ante la sensibilidad a los cambios de la luz. No obstante, también pueden tener otras causas como precedente.

Causas y factores de riesgo de las moscas volantes

La causa más común que conduce a la percepción de estas miodepsias es el desprendimiento repentino del vítreo. Además de esas sombras, los pacientes también pueden detectar ciertos destellos, rayos o lucecitas brillantes. Dichas manifestaciones luminosas que experimentan algunos pacientes, son denominadas como “migrañas oculares”. 

Asimismo, existen ciertos factores de riesgo que responden a la estadística. Y es que encontramos una mayor frecuencia en personas con miopía, operadas de cataratas o que han sido sometidas a una intervención por capsulotomía.

Cabe mencionar que estas apariciones de hilos y sombras son más comunes conforme avanza la edad.

¿Qué es el humor vítreo exactamente?

El humor vítreo es una gelatina compuesta por agua, electrolitos, proteínas, colágeno y ácido hialurónico que tiene por función proporcionar estabilidad y consistencia a nuestro ojo. Este componente gelatinoso rellena la cavidad del globo ocular, el espacio entre la superficie interna de la retina y la cara posterior del cristalino. Asimismo, además de darle forma, tiene la función de evitar daños a nuestra retina, que es un tejido muy delicado, ya sea por golpes o traumatismos, cambios bruscos de movimiento, etc.

Prevención y tratamiento de las miodepsias

Dado que aparecen de modo repentino (excepto ciertos patrones como los anteriormente mencionados como la miopía, las cataratas o capsulotomías), no existe un modo indiscutible para prevenir las miodepsias.

No obstante, excepto casos aislados, no debes temerlas excesivamente, ya que son síntomas molestos pero no dolorosos. Además, suelen aparecer por cambios de luz o exposiciones prolongadas a luces cegadoras como el sol y al poco se acaban yendo.

Sin embargo, si empiezas a notar que estas molestias se prolongan, deberías prestarles especial atención, dado que estas moscas pueden ser parte de la sintomatología de una enfermedad ocular grave.

“Ya sea de origen inflamatorio (uveítis posteriores), hemorrágico (hemorragias vítreas de origen diverso) o tumoral (neoplasias intraoculares)”.

En casos más extremos e intolerables, existe un tratamiento quirúrgico con anestesia local denominado vitrectomía. Éste consiste en la extracción de dicho del vítreo para, posteriormente, reponerlo por una solución especialmente creada para cumplir su misma función. No obstante, al tratarse de una intervención tan especializada y específica solo debe llevarse a cabo en aquellos casos en los que realmente la molestia sea significativa.

¿Qué recomendaciones nos dan los expertos?

¿Se pueden prevenir los destellos de luz en los ojos? Como te hemos comentado, no existe una norma 100% efectiva para prevenirnos de dichos desprendimientos. No obstante, nunca está de más seguir los consejos de los especialistas para potenciar hábitos saludables que beneficien nuestra vista. Por ejemplo, seguir una alimentación equilibrada, mantener los ojos hidratados para evitar al máximo posible el fenómeno del ojo seco, descansar tanto de pantallas como durmiendo las horas adecuadas para evitar fatiga visual o protegernos del sol (¡no solo en verano, también en el resto de las estaciones!).

Pero, sobre todo, nuestra máxima recomendación es que acudas con regularidad al oftalmólogo para realizar las visitas anuales, o ante cualquier anomalía sintomatológica. ¡Confía en nuestra experiencia y profesionalidad para ello!